CAPITANICH: “EL DESAFÍO ACTUAL CONSISTE EN PROMOVER EL ASOCIATIVISMO Y FUENTES DE FINANCIAMIENTO CON SUSTENTABILIDAD EN EL TIEMPO”
Con la participación de asociaciones de productores, empresarios y funcionarios nacionales, se reunió en el Chaco la Mesa Nacional de Dialogo para la Agricultura con el objeto de avanzar en la construcción y consolidación de un modelo agrario inclusivo y sustentable en términos económicos, sociales y ambientales.
El cierre de la reunión fue encabezado por el gobernador Jorge Capitanich, junto al subsecretario de Fortalecimiento Institucional, Ramiro Fresneda; el subsecretario de Ejecución de Programas para la Agricultura Familiar, Osvaldo Gustavo Chiaramonte, ambos de la Secretaría de Agricultura de Nación; y a monseñor Jorge Lozano, presidente de la Comisión Episcopal de la Pastoral Social de la Iglesia Católica.
“Los grandes desafíos de este espacio consisten en promover el asociativismo y fuentes de financiamiento con sustentabilidad en el tiempo”, subrayó el gobernador, tras mencionar la posibilidad de implementar una mesa de tierras en la provincia. Inició su discurso haciendo hincapié en la necesidad de revertir la estructura productiva asimétrica del país y trazó para ello, algunas líneas de acción importantes. Acceso a la tecnología, cooperativismo, sistema de corresponsabilidad gremial, creación de centrales agroalimentarias para facilitar la comercialización y cumplimiento de la Ley de Biocidas (fumigaciones), son algunas de las acciones que el mandatario destacó.
Consideró que el acceso a la tecnología es una necesidad imperiosa para generar una estructura diversificada de producción, aumentar la rentabilidad y favorecer el arraigo a la tierra. De la misma forma, sostuvo que es necesario poner en marcha centrales agroalimentarias para alentar la comercialización de la producción. “Debemos crear canales para ayudar a los productores a comercializar; es fundamental la intervención estatal para que los grandes productores no se coman a los pequeños”, explicó.
Otra de las acciones a la que se refirió es la implementación de un sistema de logística de comercialización para abaratar costos. Sobre corresponsabilidad gremial, citó la Ley Nº 26.337 de su autoría que garantiza inclusión social y laboral para los trabajadores rurales, con acceso a obra social, jubilación y cobertura de riesgo de trabajo.
En representación del Gobierno provincial estuvieron presentes los ministros de Producción, Marcelo Repetto y de Desarrollo Social, Marta Soneira.
Revitalizar el sistema cooperativista
En cuanto a los logros registrados a nivel provincial para mejorar las condiciones del sector productivo, Capitanich destacó las viviendas rurales, 15 mil conexiones de electrificación rural, 1600 kilómetros de acueducto para expandir el servicio de agua, y entrega de 3316 títulos de propiedad de la tierra de los cuales, 656 corresponden a comunidades aborígenes. Valoró además la creación de 93 consorcios de servicios rurales que permitieron integrar a 14.500 productores de la agricultura familiar.
“Estamos haciendo un gran esfuerzo en Chaco por revitalizar el sistema cooperativista”, dijo al respecto y comentó que se pretende que el impuesto inmobiliario rural que graba a las mayores superficies, tenga un efecto redistributivo para el asociativismo.
Por otro lado, mencionó dos conflictos actuales que se suscitaron en el ámbito provincial en cuánto a la adjudicación de tierras. Uno tiene que ver con la adjudicación de 140 mil hectáreas en el interfluvio Teuco-Bermejito y conflictos entre las comunidades aborígenes y criollas que habitan esas tierras; y otro, con el compromiso de adjudicar 308 mil hectáreas en la denominada Reserva Grande.
Por último, destacó el trabajo de la mesa y su aporte a la paz social, reivindicación de los derechos de los productores y puesta en marcha de un modelo productivo sustentable.
“Evitar la expulsión de los pobladores de sus territorios rurales”
La Mesa de Dialogo es una comisión permanente de trabajo y de intercambio, impulsada mancomunadamente en 2013 por la Comisión Episcopal de la Pastoral Social de la Iglesia Católica y la Secretaría de Agricultura Familiar del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.
El objetivo primario y convocante consiste en erradicar la violencia y evitar la expulsión de los pobladores de sus territorios rurales, proponiendo no sólo el intercambio y conocimiento de las situaciones existentes conflictivas, sino además, a través de experiencias que ya han sido exitosas, buscar futuras soluciones.
Además, procura el intercambio y conocimiento de prácticas diversas que tiendan al desarrollo sustentable de la comunidad, el desarrollo de experiencias pilotos, y el debate sobre la convivencia y articulación de los distintos modelos de producción.
Participan, Monseñor Jorge Lozano, presidente de la Comisión Episcopal de la Pastoral Social de la Iglesia Católica; y representantes de la Subsecretaría de Fortalecimiento Institucional, Secretaría de Agricultura Familiar del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, la Unidad para el Cambio Rural (UCAR).
También forman parte la Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (ACSoja), la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (AAPRESID), Asociación de Semilleros Argentinos (ASA), la Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y LA Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (AACREA).
En representación de las organizaciones campesinas, indígenas y de la agricultura familiar, integran este espacio la Asamblea Campesina Indígena del Norte Argentino (ACINA), Red Agroforestal del Chaco Argentino (REDAF), Frente Nacional Campesino (FNC), Federación de Organizaciones Nucleadas de la Agricultura Familiar (FONAF), Movimiento Nacional Campesino Indígena-Vía Campesina (MNCI-VC), la Federación Agraria Argentina (FAA) y el Frente Agrario Evita.
Fresneda: “Chaco, pionera en la construcción de un modelo agropecuario inclusivo”
El subsecretario de Fortalecimiento Institucional del Ministerio Agricultura de la Nación, Ramiro Fresneda, valoró el trabajo del gobierno provincial en lo que respecta a las iniciativas del sector. “Chaco fue pionera en dictar normativas que beneficien a las mayorías rurales, construyendo así un modelo agropecuario inclusivo” dijo y citó como un ejemplo a la Ley de Servicios de Consorcios Rurales.
El funcionario explicó que se busca construir un modelo agropecuario sustentable para que el mercado no beneficie solo a los grandes productores. “Creemos en el arraigo local de las familias agricultoras, y por ello impulsamos un espacio en el que los empresarios y los agricultores coexisten en un modelo agrario diseñado por todos”, remarcó.
Por su parte, monseñor Lozano destacó el dialogo que se originó a partir de la conformación de la mesa de la agricultura, y señaló que “si bien se superaron muchas suspicacias y se afianzó el clima de trabajo, aún resta resolver muchas situaciones de conflicto”. Mencionó así entre los principales temas a tratar, el cumplimiento estricto de la Ley de Bosques y la unificación de criterios en materia de fumigación, entre otros.
“Los grandes desafíos de este espacio consisten en promover el asociativismo y fuentes de financiamiento con sustentabilidad en el tiempo”, subrayó el gobernador, tras mencionar la posibilidad de implementar una mesa de tierras en la provincia. Inició su discurso haciendo hincapié en la necesidad de revertir la estructura productiva asimétrica del país y trazó para ello, algunas líneas de acción importantes. Acceso a la tecnología, cooperativismo, sistema de corresponsabilidad gremial, creación de centrales agroalimentarias para facilitar la comercialización y cumplimiento de la Ley de Biocidas (fumigaciones), son algunas de las acciones que el mandatario destacó.
Consideró que el acceso a la tecnología es una necesidad imperiosa para generar una estructura diversificada de producción, aumentar la rentabilidad y favorecer el arraigo a la tierra. De la misma forma, sostuvo que es necesario poner en marcha centrales agroalimentarias para alentar la comercialización de la producción. “Debemos crear canales para ayudar a los productores a comercializar; es fundamental la intervención estatal para que los grandes productores no se coman a los pequeños”, explicó.
Otra de las acciones a la que se refirió es la implementación de un sistema de logística de comercialización para abaratar costos. Sobre corresponsabilidad gremial, citó la Ley Nº 26.337 de su autoría que garantiza inclusión social y laboral para los trabajadores rurales, con acceso a obra social, jubilación y cobertura de riesgo de trabajo.
En representación del Gobierno provincial estuvieron presentes los ministros de Producción, Marcelo Repetto y de Desarrollo Social, Marta Soneira.
Revitalizar el sistema cooperativista
En cuanto a los logros registrados a nivel provincial para mejorar las condiciones del sector productivo, Capitanich destacó las viviendas rurales, 15 mil conexiones de electrificación rural, 1600 kilómetros de acueducto para expandir el servicio de agua, y entrega de 3316 títulos de propiedad de la tierra de los cuales, 656 corresponden a comunidades aborígenes. Valoró además la creación de 93 consorcios de servicios rurales que permitieron integrar a 14.500 productores de la agricultura familiar.
“Estamos haciendo un gran esfuerzo en Chaco por revitalizar el sistema cooperativista”, dijo al respecto y comentó que se pretende que el impuesto inmobiliario rural que graba a las mayores superficies, tenga un efecto redistributivo para el asociativismo.
Por otro lado, mencionó dos conflictos actuales que se suscitaron en el ámbito provincial en cuánto a la adjudicación de tierras. Uno tiene que ver con la adjudicación de 140 mil hectáreas en el interfluvio Teuco-Bermejito y conflictos entre las comunidades aborígenes y criollas que habitan esas tierras; y otro, con el compromiso de adjudicar 308 mil hectáreas en la denominada Reserva Grande.
Por último, destacó el trabajo de la mesa y su aporte a la paz social, reivindicación de los derechos de los productores y puesta en marcha de un modelo productivo sustentable.
“Evitar la expulsión de los pobladores de sus territorios rurales”
La Mesa de Dialogo es una comisión permanente de trabajo y de intercambio, impulsada mancomunadamente en 2013 por la Comisión Episcopal de la Pastoral Social de la Iglesia Católica y la Secretaría de Agricultura Familiar del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.
El objetivo primario y convocante consiste en erradicar la violencia y evitar la expulsión de los pobladores de sus territorios rurales, proponiendo no sólo el intercambio y conocimiento de las situaciones existentes conflictivas, sino además, a través de experiencias que ya han sido exitosas, buscar futuras soluciones.
Además, procura el intercambio y conocimiento de prácticas diversas que tiendan al desarrollo sustentable de la comunidad, el desarrollo de experiencias pilotos, y el debate sobre la convivencia y articulación de los distintos modelos de producción.
Participan, Monseñor Jorge Lozano, presidente de la Comisión Episcopal de la Pastoral Social de la Iglesia Católica; y representantes de la Subsecretaría de Fortalecimiento Institucional, Secretaría de Agricultura Familiar del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, la Unidad para el Cambio Rural (UCAR).
También forman parte la Asociación de la Cadena de la Soja Argentina (ACSoja), la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (AAPRESID), Asociación de Semilleros Argentinos (ASA), la Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y LA Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (AACREA).
En representación de las organizaciones campesinas, indígenas y de la agricultura familiar, integran este espacio la Asamblea Campesina Indígena del Norte Argentino (ACINA), Red Agroforestal del Chaco Argentino (REDAF), Frente Nacional Campesino (FNC), Federación de Organizaciones Nucleadas de la Agricultura Familiar (FONAF), Movimiento Nacional Campesino Indígena-Vía Campesina (MNCI-VC), la Federación Agraria Argentina (FAA) y el Frente Agrario Evita.
Fresneda: “Chaco, pionera en la construcción de un modelo agropecuario inclusivo”
El subsecretario de Fortalecimiento Institucional del Ministerio Agricultura de la Nación, Ramiro Fresneda, valoró el trabajo del gobierno provincial en lo que respecta a las iniciativas del sector. “Chaco fue pionera en dictar normativas que beneficien a las mayorías rurales, construyendo así un modelo agropecuario inclusivo” dijo y citó como un ejemplo a la Ley de Servicios de Consorcios Rurales.
El funcionario explicó que se busca construir un modelo agropecuario sustentable para que el mercado no beneficie solo a los grandes productores. “Creemos en el arraigo local de las familias agricultoras, y por ello impulsamos un espacio en el que los empresarios y los agricultores coexisten en un modelo agrario diseñado por todos”, remarcó.
Por su parte, monseñor Lozano destacó el dialogo que se originó a partir de la conformación de la mesa de la agricultura, y señaló que “si bien se superaron muchas suspicacias y se afianzó el clima de trabajo, aún resta resolver muchas situaciones de conflicto”. Mencionó así entre los principales temas a tratar, el cumplimiento estricto de la Ley de Bosques y la unificación de criterios en materia de fumigación, entre otros.
fuente:chacoprensa.net
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